¿Cómo era la tecnología alfarera de los grupos humanos que habitaron el litoral rioplatense en el partido de Punta Indio? ¿Qué dimensiones tenían las vasijas y otros objetos que fabricaban? Con técnicas novedosas, usando tecnología 3D, un grupo de investigadores de XX logró reconstruir virtualmente un conjunto de piezas de los antiguos pobladores, para identificar qué funciones tenían y cómo era su aspecto.
Los Tres Ombúes es un sitio arqueológico ubicado en el partido de Punta Indio, en la provincia de Buenos Aires. Ocupa una extensión equivalente a unas de 3 canchas de básquet, donde residían antiguos habitantes cazadores-recolectores, que además eran ceramistas.
Los investigadores encontraron allí restos de maderas carbonizadas, instrumentos de piedra, masas de arcilla, y huesos de animales. Sin embargo, el hallazgo más importante y revelador fueron los numerosos restos de objetos de cerámica que lograron sobrevivir bajo la tierra, al paso del tiempo.
El sitio fue identificado en febrero de 2016, y a partir del fragmento de un hueso del ciervo de los pantanos encontrado allí, los investigadores pudieron datar los hallazgos en el Holoceno tardío, hace aproximadamente 1000 años. Si bien no es posible conocer la identidad de los pobladores a partir de la información disponible, el registro arqueológico tiene mucho para decir acerca de cómo vivían. Según las crónicas, la zona era habitada por querandíes, pero el sitio fue habitado unos 500 años antes y resulta muy difícil establecer la continuidad poblacional sin contar con otros indicios.
El trabajo, titulado Aproximación a las formas cerámicas del sitio arqueológico Los Tres Ombúes (Partido de Punta Indio, Provincia de Buenos Aires) mediante la reconstrucción virtual, fue publicado en la Revista del Museo de La Plata, en 2023.
Reconstruir la historia
La presencia de pobladores en la costa rioplatense se remonta, según las evidencias, a 1800 años atrás. “Los antiguos habitantes de Los Tres Ombúes eran grupos sociales pequeños que cazaban, pescaban, recolectaban, eran alfareros y realizaban intercambios con gente de otras áreas, mediante las cuales obtenían, por ejemplo, las materias primas rocosas que les servían para fabricar herramientas.”, describe la Dra. Naiquen Ghiani Echenique, arqueóloga e investigadora del Laboratorio de Análisis Cerámico de la Facultad de Ciencias Naturales y Museo de la UNLP, autora del trabajo.
Comprender las técnicas que dominaban y cómo eran los objetos que creaban permite a los investigadores, eventualmente, conocer sus hábitos y conectar a los habitantes de ese sitio con otros de la región. En pocas palabras, reconstruir la historia. Pero el paso del tiempo, los procesos naturales y la manipulación humana suelen reducir los recipientes y utensilios a fragmentos, dificultando la tarea de describir qué funciones desempeñaban y cómo lucían.
Gran parte de los 1461 tiestos (pedazos de vasijas de barro) que pudieron recuperar en Punta Indio son fragmentos de cerámica, pero casi ninguna pieza estaba entera o completa como para reconstruir su forma original, como quien arma un rompecabezas. Este proceso, llamado remontaje, puede proporcionar información valiosa sobre la producción, el uso y las prácticas culturales de la sociedad que los produjo.Cuando no es posible rearmar la pieza a partir de la unión de los fragmentos, ya que solo se dispone de unos pocos, el problema requiere otras herramientas.
En el caso del sitio Tres Ombúes, el equipo de investigadores practicó una reconstrucción virtual de una selección de restos de cerámicas. ¿De qué se trata esta técnica? Ghiani Echenique explica que, “la reconstrucción virtual es una técnica que nos permite reconstruir virtualmente un objeto que está incompleto. Es un tipo de virtualización (porque se obtiene como resultado un modelo virtual) en la cual se incluyen inferencias que incorporan información extra, más allá de lo que se puede observar, para llegar al objeto completo.”
La arqueología es una de las disciplinas que desde sus inicios se nutrió de los aportes de la comunidad no académica, tanto en objetos y colecciones como en saberes. La reconstrucción de la alfarería de Los Tres Ombúes sigue esta tradición, ya que para construir la representación virtual fue fundamental el aporte del diseñador multimedia Víctor Coronel. “Se acercó desinteresadamente a colaborar con nuestras investigaciones. Por interés propio estaba buscando información arqueológica para hacer reconstrucciones, y se encontró con un trabajo mío donde empecé con esta técnica”, relata Ghiani Echenique, agradecida. Primeramente seleccionaron aquellas piezas que tuvieran pistas sobre las formas y dimensiones, es decir sobre el diámetro de la boca de la pieza y su altura. Así, lograron un conjunto de seis vasijas. Para cada una, realizaron ilustraciones, a partir de proyecciones sobre fotografías a escala. Posteriormente, el dibujo fue digitalizado e introducido en un programa informático para generar el objeto en 3D. “Elegimos utilizar Blender ya que se trata de un programa de acceso abierto que permite obtener modelos tridimensionales de muy buena calidad, y es por ello que está siendo utilizado para la virtualización de materiales y sitios arqueológicos a escala mundial.”
Así, pudieron determinar que se trataba de tres cuencos, dos escudillas (o platos soperos) y un vaso. También para cada caso se realizaron los cálculos de la capacidad y de la masa del recipiente vacío, datos que resultan de importancia para la interpretación funcional de las piezas.
La reconstrucción virtual de las seis piezas representadas en el
registro cerámico del sitio Los Tres Ombúes permitió explorar las características morfológicas y aportar a su percepción visual, lo cual implica un amplio potencial para la comunicación científica.
La investigadora pone especial énfasis en este aspecto del trabajo realizado: “los arqueólogos y arqueólogas podemos caracterizar las formas cerámicas a partir de conjuntos fragmentarios, pero resulta muy difícil que otras personas puedan imaginar las piezas a partir de esas descripciones. Así, esta técnica cobra importancia para que todas las personas puedan visualizar las formas cerámicas del pasado. Pensemos por ejemplo en lo que esto podría significar en el marco de una exposición de arqueología, un video o un libro orientados a comunicar los resultados de nuestras investigaciones.”
Asimismo, los cálculos posibilitados por el programa aportaron datos significativos tendientes a la interpretación funcional del conjunto cerámico.
El trabajo en el sitio de Los Tres Ombúes no está finalizado. “Actualmente estamos profundizando la investigación. En noviembre de 2023 finalizamos la ampliación de las excavaciones. Tenemos mucho material nuevo para analizar y así continuar indagando las formas cerámicas generadas y usadas por los antiguos habitantes del lugar”, concluye la investigadora. Para saber cómo continúa la historia, se puede seguir al equipo de trabajo por sus redes sociales (facebook e instagram) bajo el nombre Arqueología rioplatense.