Un total de doce minibuses eléctricos arribaron recientemente a la ciudad de Buenos Aires desde China para integrarse a un nuevo servicio que conectará Retiro con Parque Lezama.
El proyecto, impulsado por el Ministerio de Movilidad Urbana, forma parte de una estrategia más amplia para modernizar el sistema de transporte público porteño, con foco en la sostenibilidad ambiental y la equidad de género.
Las unidades, que ya pasaron las pruebas técnicas exigidas por el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), están listas para comenzar a operar en los próximos días. Durante el primer mes, el servicio será gratuito, y luego podría establecerse una tarifa equiparable a la de los colectivos tradicionales. El sistema será compatible con la tarjeta SUBE y funcionará todos los días, entre las 5 de la mañana y la 1 de la madrugada.
Los minibuses, con capacidad para 30 pasajeros, estarán conducidos exclusivamente por mujeres, seleccionadas a través de un programa de becas impulsado por la Subsecretaría de la Mujer. Las conductoras recibieron capacitación específica para manejar estos vehículos, lo que convierte a este proyecto en un hito también en términos de inclusión y equidad laboral en el transporte público.
En su primera etapa, el recorrido de 12,3 kilómetros atravesará los barrios de Retiro, San Nicolás, Monserrat, San Telmo y La Boca, conectando la zona de San Martín con Parque Lezama. El itinerario contará con 36 paradas y, aunque la velocidad comercial promedio será de 12 km/h, las unidades pueden alcanzar hasta 60 km/h fuera del microcentro.
La operación del servicio estará a cargo de la empresa DOTA, que ganó la licitación con una oferta de $3500 millones, la mitad del presupuesto oficial previsto. La firma Agrale fue la responsable de importar los vehículos, todos equipados con tecnología de asistencia a la conducción, piso bajo para facilitar el acceso y motores eléctricos que no emiten gases contaminantes.
Este avance se enmarca en un proceso de transformación del transporte público que la ciudad viene intentando consolidar desde hace años. A pesar de intentos fallidos, como la licitación de 400 colectivos eléctricos en 2016 o la prueba piloto de 2019, esta nueva iniciativa busca sentar las bases para una transición definitiva hacia una movilidad urbana más limpia y eficiente.
Desde el Ministerio de Movilidad Urbana aseguraron que el desempeño del servicio será monitoreado y que no descartan extender el recorrido hasta Caminito, en La Boca, dependiendo de la respuesta del público y la operatividad de las unidades. Buenos Aires, así, se suma a otras grandes ciudades latinoamericanas que ya comenzaron a electrificar su flota de transporte, apostando por una ciudad más verde e inclusiva.