Un operativo conjunto de Gendarmería Nacional y las policías de Salta y Mendoza culminó con la detención de ocho personas, entre ellas Miguel Ángel Torres, un comandante mayor retirado de Gendarmería Nacional, acusado de liderar una organización dedicada al tráfico de estupefacientes.
La banda fue desmantelada en Guaymallén, Mendoza, mientras intentaba ingresar droga proveniente de Salta.
La investigación, liderada por el Ministerio Público Fiscal (MPF), reveló que la organización operaba desde Orán, Salta, transportando drogas hacia Mendoza. Durante el operativo se secuestraron más de 34 kilos de cocaína, casi un kilo de éxtasis, dos armas de fuego, dinero en efectivo y vehículos utilizados para las operaciones.
La banda operaba con una estructura jerárquica y predefinida en la que algunos vehículos transportaban la droga, mientras que otros, actuando como «coches punteros», advertían sobre controles policiales. Miguel Ángel Torres, quien había ocupado altos cargos en Gendarmería y se retiró con el grado de comandante mayor, coordinaba las operaciones gracias a su experiencia en seguridad y tácticas de tráfico.
Entre los detenidos se encuentran también su hijo de 25 años, Miguel Emanuel Torres Ibba, y otros miembros relacionados con fuerzas de seguridad. Además, se arrestó a Sandra Mariela Areco Florentín, agente administrativa del Servicio Penitenciario de Salta, y a su expareja, Daniel Antonio Olivera Serrano, exmiembro de la misma fuerza.
La organización tenía vínculos transnacionales, obteniendo la droga en Bolivia, almacenándola en Orán y transportándola a Mendoza para su distribución. Los fiscales Eduardo Villalba y Carlos Amad, junto con la Procuraduría de Narcocriminalidad (PROCUNAR), destacaron que la banda operaba desde hace al menos tres meses.