Gimnasia y Esgrima La Plata se prepara para un duelo clave en su lucha por meterse en zona de clasificación en el Torneo Apertura 2025. Este viernes, recibirá a un River que llega con un presente irregular, pero que sigue siendo un rival de peso.
El partido marcará el regreso de ambos equipos tras casi una semana sin acción, y el Lobo intentará cortar una racha adversa que ya lleva dos meses sin victorias.
A falta de tres fechas para el cierre del campeonato, el equipo dirigido por Diego Flores se encuentra en el puesto 11 con 13 puntos, apenas uno por debajo de Instituto, hoy último clasificado. El margen de error es mínimo, y el duelo ante el Millonario puede ser determinante para seguir con vida en la pelea.
Sin embargo, Gimnasia afrontará este compromiso con una baja importante: Gastón Suso no podrá estar presente tras haber acumulado cinco tarjetas amarillas. El defensor, una de las piezas más destacadas del equipo en lo que va del año, venía de cumplir una sanción por expulsión ante Sarmiento y volvió frente a Estudiantes, donde vio la amarilla que lo margina del encuentro ante River.
La ausencia de Suso obliga al técnico a buscar variantes en una defensa que no ha mostrado solidez en las últimas jornadas. Su liderazgo y presencia física venían siendo clave en un equipo que necesita reforzar su funcionamiento en el fondo.
El rival: River, con bajas y la cabeza en el Superclásico
Por el lado de River, el panorama tampoco es ideal. Marcelo Gallardo deberá gestionar su plantel pensando en lo inmediato pero también en el Superclásico ante Boca que se disputará el próximo fin de semana. En ese sentido, Lucas Martínez Quarta, al borde de la suspensión por acumulación de amarillas, podría no ser arriesgado en La Plata.
A esta situación se suma la lesión de Paulo Díaz, quien sufrió un desgarro en el bíceps femoral derecho y quedó descartado tanto para el cruce con Gimnasia como para el partido de Copa ante Independiente del Valle. Su presencia ante Boca también es una incógnita.
La hora de dar el golpe
Más allá de las bajas en ambos lados, Gimnasia está obligado a salir a buscar los tres puntos si quiere mantenerse en carrera. Con el apoyo de su gente en el Bosque y ante un rival que podría llegar con rotaciones, el Lobo tiene la oportunidad de dar un golpe y recuperar confianza en el tramo final del torneo.
Los números no juegan a su favor, pero en el fútbol las rachas están para romperse. Gimnasia necesita más que nunca volver a creer.