En el día internacional del agua la Universidad Nacional de La Plata renueva su compromiso con la gestión sostenible de este elemento vital, contribuyendo así al bienestar de la sociedad y al cuidado del ambiente a través de enfoques integrales y colaborativos que contribuyen a un futuro mejor.
La UNLP en cumplimiento de sus deberes ambientales y respondiendo a los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030, viene trabajando en diversas áreas para llevar a esta institución académica a ser un ejemplo en las buenas prácticas ambientales, reduciendo el impacto generado por sus actividades, promoviendo el manejo y gestión sustentable de sus recursos, y en los casos en que no es posible la eliminación de las emisiones, verificar la absorción de las mismas que la propia universidad efectúa, a través de sus espacios verdes propios, y cuanto se absorbe.
La Dirección de Seguridad, Higiene y Desarrollo Sustentable de la Secretaría de Planeamiento Obras y Servicios elaboró la Huella Hídrica institucional de consumo directo, a los efectos de que desde el punto de vista ambiental se aporte al control de la “escasez de agua dulce” y con objetivos de contribuir a garantizar la disponibilidad de agua y su gestión sostenible y el saneamiento para todos.
Según la Organización Mundial de la Salud, son 50 litros diarios por persona, para cubrir las necesidades básicas como: básicas: beber, cocinar, higiene personal, y limpieza. Es importante destacar, que estas actividades básicas también se dan en el entorno universitario, ya que se cuenta con comedores, lugares de expendio de comidas, albergues estudiantiles, sanitarios y lugares para higiene personal y limpieza de las instalaciones. De acuerdo a los datos primarios sobre consumo de agua, ¼ de lo que consume una persona que trabaja o estudia, es empleada diariamente en las actividades del ámbito universitario.
En el caso del agua, se trata un recurso limitado y vital. Evaluar la huella hídrica permite optimizar su uso, identificar áreas de mejora y contribuir a la gestión sostenible del agua. Para ello también cuenta con otras herramientas como la Guía de buenas prácticas ambientales confeccionado por la Secretaría de Ambiente ( link: Guía de buenas prácticas ambientales de la UNLP), que incluye la concientización sobre el consumo responsable, la producción sostenible y la evaluación del consumo, la calidad y la disponibilidad del agua en el campus
El Director de Seguridad e Higiene de la casa de estudios platense Andres Fiandrino, expresó que: “la investigación empírica llevada adelante desde la Direcciónnos permitió contar con datos ciertos que expresan la realidad ambiental de la institución universitaria: las emisiones que realiza, el control del agua y que la universidad absorbe todas las emisiones de gases efectos invernadero que produce, todo en el marco de los Objetivos de Desarrollo Sostenible”
“Todo esto nos permitió elaborar acciones de mitigación de las emisiones de gases efectos invernadero, la eficiencia energética, la gestión sustentable, el mantenimiento del arbolado universitario, los espacios verdes, y fundamentalmente la optimización del consumo de agua”.
La huella hídrica azul directa, cuyos primeros cálculos han dado los siguientes resultados: en un año el consumo directo de la UNLP es de 375.992 m3 de agua, pudiendo a partir de este dato, obtener un consumo per cápita general, (ya que la universidad es un organismo de mucha movilidad tanto funcional como de personal incluyendo alumnos).
Por su parte el Secretario de Planeamiento Obras y Servicios Arq Diego Delucchi, expresa que: desde 2012 al 2019, la superficie construida de la Universidad aumentó, 99.515 m2 (un 28 %). Sin embargo, el consumo de agua no solo se mantuvo, sino que bajó un 23 %, (de 461.551 a 375.992 m3), debido fundamentalmente a las políticas de sustentabilidad implementadas, arreglo de pérdidas y colocación de canillas de corte automático, entre otras.
“Esta huella complementa el logro institucional ambiental de la Universidad, en haberse transformado en la primera universidad de argentina en obtener carbono neutro en sus actividades, certificadopor su huella de carbono y su estudio de absorción de CO2 por su arbolado”, concluyó el Mg Fiandrino