El trabajo articulado y las acciones consensuadas entre diferentes organismos del Estado nacional y provincial permitieron, en cumplimiento de una resolución judicial, aumentar el monto de la recompensa a quien aporte datos sobre una mujer que permanece desaparecida desde hace 14 años y difundir tanto la imagen de la joven cuando había sido vista por última vez en la ciudad de Santa Fe como la que sería su fisonomía actual, generada por inteligencia artificial.
Asimismo, con la colaboración de la Jefatura de Gabinete de Ministros que conduce Agustín Rossi y de la que depende el Comité Ejecutivo de Lucha contra la Trata y Explotación de Personas y para la Asistencia a las Victimas, también se actualizó el monto de la reparación económica que en este caso será percibida por los familiares de Natalia Acosta, quien tenía 21 años al momento de su desaparición.
Además de contar con la intervención del Programa de Asesoramiento y Promoción de Derechos de las Víctimas del Delito de Trata de Personas de la Defensoría General de la Nación -cuya titular, Marcela Rodríguez, representa a la familia en el proceso judicial-, en esta tarea articulada también participan el Ministerio de Seguridad de la Nación, bajo cuya órbita funciona el Programa Nacional de Recompensas, y la Secretaría de Derechos Humanos de Santa Fe, dependiente del Ministerio de Gobierno, Justicia y Derechos Humanos de la provincia.
La recompensa para quienes aporten datos útiles o tengan conocimiento del paradero de Natalia Acosta fue establecida en 4 millones de pesos, a lo que se suma la publicación y difusión del retrato de la joven al momento de su desaparición y de la progresión de su imagen generada con un programa de inteligencia artificial, que permite contar con una foto actualizada de la mujer.
Todas estas acciones cuentan con el consenso de Ariel y Carmela Acosta. el padre y la hermana de Natalia, quienes a su vez manifestaron que su principal intención es continuar con la búsqueda de la mujer como el primer día, siendo este su principal objetivo. La joven había sido vista por última vez el 29 de mayo de 2009, luego de ausentarse de su hogar en el Barrio Centenario de la localidad santafesina de Santo Tomé.