Intentan nuevamente impulsar otra vez la Ley Ómnibus

El segundo round que podría tener la Ley ómnibus en el Congreso en caso de que el Poder Ejecutivo consiga encarrilar una negociación con los gobernadores volverá a poner sobre la mesa la posibilidad de que el equipo económico había considerado descartada hace pocas semanas: que parte del ajuste fiscal pronunciado que necesita este año para equilibrar las cuentas públicas pueda ser conseguido, además de por un fuerte recorte de partidas, por mayores ingresos que provengan de subas impositivas.

La Casa Rosada abrió la puerta para que la discusión con los mandatarios provinciales tenga como resultado un apoyo amplio al megaproyecto de ley, que naufragó en las sesiones extraordinarias, a cambio de un alivio fiscal para las alicaídas arcas provinciales.

Una posibilidad es la restitución de la cuarta categoría de Ganancias, pero en este aspecto ya hubo alguna aspereza: la Nación quiere achacarle esa idea a los gobernadores y estos tampoco quieren absorber el costo político de reducirle el salario a un amplio grupo de trabajadores en un contexto de profunda recesión económica.

En ese contexto, de todas formas, el equipo económico que conduce Luis Caputo podría obtener una buena tajada si el ida y vuelta con las provincias llegaran a buen puerto, un escenario que todavía es lejano pero al que buscarán apuntar desde el Poder Ejecutivo. Esa tajada se traduce en el “formato” del ajuste fiscal de este año, de cinco puntos porcentuales del Producto Bruto, una magnitud con pocos antecedentes en las últimas tres décadas tanto en la Argentina como en otras economías.

La convocatoria del presidente Javier Milei a una nueva ronda negociadora con los gobernadores vuelve a poner sobre la mesa algunos artículos y medidas que están relacionadas con el ajuste fiscal que busca Luis Caputo y que necesitaban respaldo parlamentario.

Costo del fracaso inicial
Para ponerlo en grandes números, los analistas destacan: el fracaso del primer intento de sanción de la Ley Ómnibus como se bautizó en forma simplificada a la propuesta de “Ley Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos” le había costado al Poder Ejecutivo casi 1,5% del PBI del ajuste total de 5 puntos del PBI que necesita este año, por perder la idea de una suba generalizada de retenciones, la restitución de Ganancias y cambios en el Impuesto a los Bienes Personales.

Todavía no está claro si el texto completo de la segunda versión del megaproyecto será o no idéntico a la última versión negociada sobre el filo en Diputados, que había logrado el respaldo en el tratamiento en general, justo antes de que el oficialismo decidiera retirarlo ante la falta de apoyos en la votación en particular.