La crisis que atraviesa la industria de la construcción por la paralización de la obra pública comienza a mostrar sus consecuencias más severas en sectores clave como la cerámica y la producción de ladrillos.
Dos emblemáticas fábricas, ubicadas en La Plata y Olavarría, confirmaron procesos de reestructuración que ya implican más de un centenar de despidos.
En La Plata, la empresa Cerámica Fanelli, con sede en la localidad de Los Hornos, notificó la desvinculación de al menos 30 trabajadores. Con una planta de más de 180 operarios, la firma había anunciado inversiones en 2023 por $650 millones, orientadas a expandir su capacidad de producción. Desde el gremio que representa a los trabajadores ceramistas, FOCRA, denuncian que los despidos responden a una estrategia de ajuste que incrementa la carga laboral sobre menos personal, deteriorando las condiciones de trabajo y seguridad.
El próximo martes se llevará a cabo una reunión clave entre representantes del sindicato y la empresa, en la que se planteará como alternativa la implementación de suspensiones temporales en lugar de despidos definitivos.
Por su parte, en Olavarría, la histórica Cerro Negro, parte del grupo Sociedad Comercial del Plata, anunció el cierre de su línea de pisos y la cesantía de 100 operarios. En respuesta, el Sindicato de Obreros y Empleados Ceramistas de Olavarría (SOECO) activó medidas de fuerza, generando la intervención del Ministerio de Trabajo bonaerense, que dictó una conciliación obligatoria por 15 días para frenar los despidos y suspender las huelgas.
La situación en Olavarría repercute también en el complejo Loma Negra y en Fabi Bolsas Industriales, empresa con 65 años en la localidad de Hinojo, que enfrenta dificultades como proveedor del sector.
Un contraste entre expectativas y decisiones
Paradójicamente, estas decisiones empresariales se producen en un contexto donde los indicadores de consumo muestran una leve recuperación. Según el INDEC, el consumo aparente creció un 14,4% en pisos y revestimientos cerámicos durante el primer bimestre de 2025, un 2,0% en artículos sanitarios de cerámica y un 5,9% en ladrillos huecos.
Asimismo, las expectativas empresariales recogidas en la Encuesta Cualitativa del ISAC (Indicador Sintético de la Actividad de la Construcción) para el trimestre marzo-mayo de 2025, también resultaron moderadamente optimistas: un 67,9% de las empresas dedicadas a la obra privada estima que la actividad se mantendrá y un 21,1% cree que crecerá. Entre las firmas vinculadas a la obra pública, un 23,3% prevé un aumento, mientras que un 60,2% no anticipa cambios.
Sin embargo, desde las empresas afectadas, las explicaciones se enfocan en los efectos arrastrados de la recesión de 2024 y en la necesidad de adecuar su estructura productiva a una caída en las ventas. En sus telegramas de despido, Cerro Negro justificó las cesantías señalando una “contracción sostenida del sector” y “pérdidas continuas durante el último año”.