Se estima que en la Provincia de Buenos Aires 4 millones y medio de personas tienen hipertensión arterial (HTA), pero 1 de cada 3 desconocen su diagnóstico

Aproximadamente 1.500.000 bonaerenses son hipertensos y no lo saben. Frente a esto el Ministerio de Salud articula el “Programa Provincial de Hipertensión Arterial” para profundizar la detección y los tratamientos que permitan controlar el factor de riesgo cardiovascular más frecuente, que constituye la principal causa de muerte en el mundo.

“Es una decisión del Gobernador y del Ministro acompañar todas las estrategias y fortalecer el sistema de salud para empezar a abordar líneas de trabajo como, en este caso; la presión arterial, y todas las enfermedades crónicas no transmisibles que son un problema para la salud pública”, expresó Alexia Navarro viceministra de la cartera sanitaria provincial

“Todo esto se da en un marco de fortalecimiento de la estructura de los hospitales, con mucha inversión de la Provincia, y pensando siempre en la integración del sistema; trabajar con los equipos de salud desde este Ministerio y con los municipios para generar circuitos dentro de los efectores sanitarios que sean más amigables, porque sabemos que funciona con múltiples barreras y nuestro desafío es poder eliminarlas para que la gente acceda a la salud que le corresponde”, concluyó.

EL PROGRAMA

El nuevo programa tiene 5 estrategias priorizadas a fin de lograr prevenir, diagnosticar y controlar el alto impacto que esta enfermedad silenciosa tiene en la salud. Una de ellas apunta al equipamiento de los Centros de Atención Primaria (CAPS), y de otros dispositivos de salud de alcance comunitario. Para eso, se entregaron 5.175 tensiómetros automáticos validados y, se prevé incorporar otras tecnologías sanitarias para fortalecer el diagnóstico y seguimiento de personas con hipertensión arterial.

Otros de los ejes apuntan a la comunicación y educación para la salud de la población en general, enfocada en la prevención y el diagnóstico oportuno; con la distribución de materiales dirigidos a las personas HTA que contenga información sobre los cuidados recomendados y los controles necesarios. También se apunta a la capacitación y formación continua de los equipos sanitarios mediante cursos y materiales gráficos para los efectores destinados a apoyar la toma de decisiones.

Entre los objetivos planteados se trabajará para garantizar la continuidad de las líneas de cuidados, a partir de posibilitar acuerdos entre los efectores. Esto busca definir el itinerario de las personas con hipertensión, para que el primer nivel de atención ocupe un rol de coordinación de los tratamientos y, como parte del seguimiento de estos pacientes, articule con los otros niveles cuando sea necesario.

Por último, la quinta estrategia priorizada es la de los sistemas de información donde se proponen mecanismos para mejorar los registros de pacientes, es decir que para el monitoreo y la evaluación se utilizarán distintos indicadores construidos a partir de los registros de prestaciones del programa SUMAR.